Hace tres años escribí esta entrada, (http://montecoronado.blogspot.com.es/2009/04/que-es-la-semana-santa.html). Considero que estoy de acuerdo conmigo mismo en lo que en ella se dice. No sé si eso es malo, quiero decir, que me resulta preocupante no haber cambiado de opinión en tres años. Me estaré haciendo joven, o sea, vehemente e irracional.
Al final de la entrada (en la salida) se alude a una polémica que se desató aquel año por la pertinencia o no de que los cofrades lucieran un lazo blanco contra el aborto, propuesta que fue paradójicamente abortada.
El hecho de que no haya escrito nada sobre la Semana Santa desde entonces ha venido motivado por que (1) he invertido estos días sagrados en viajar, usualmente hacia oriente.
Vayan estas fotos como ilustración de tres aspectos muy específicos de la Semana Santa de Málaga:
a) Los limones "cascarúos" que se comen con sal y/o bicarbonato. Para contrarrestar la acidez extrema de la pulpa, que se carga parte del esmalte dentario, se suele ingerir también la parte blanca de la cáscara. Es como un tequila sin alcohol.
b) "El Cautivo", un Cristo de gran devoción popular en Málaga, sobre todo en el barrio llamado de La Trinidad. He investigado infructuosamente qué relación puede haber entre este barrio, este Cristo y un cautivo del siglo XVII que conocía Málaga y que se llamó Miguel de Cervantes.
c) El concepto difuso de las palabras "papelera", "civismo" y "limpieza" que tienen foráneos y autóctonos. Mientras admiran la belleza barroca, acumulan bajo las sillas bolsas de plástico del Mercadona con tetrabrices de zumo de melocotón.
Poco has cambiado, España, desde las miserias y relumbrones del Barroco.
1.- (Nota para mis alumnos) Ahí tenéis un ejemplo de "por que" separado y sin tilde, de esos que son tan difíciles de ver en estos días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario