21.11.10

Nuevo disco de Monte Coronado Records



Los estrenos y novedades se acumulan. Hace una semana fue 16 imprompti de pipa, con escasísimo éxito de crítica y público. Ahora llega Souvenires, una recopilación de temas antiguos de distinta calidad. He aquí la introducción que he escrito en el almacén del que se pueden bajar lo archivos.

Estos recuerdos que ahora hago público tienen una larguísima historia. Empezaron con los primeros acercamientos a la producción musical, allá por el año 2005 o así. Uno de los temas de este disco (por llamarlo de alguna manera), "Akihabara", lo hice con sonidos midi tocados a mano, sin samplers ni patrones prediseñados. Luego vinieron otros ensayo con el midi y algunos (innobles) en el falaz mundo de los samplers, que también están en algún tema. No obstante, casi siempre he intentado colocar instrumentos reales eléctricos o no (bajo, guitarra, laúd egipcio, saxo...) para que todo no fueran digitalizaciones más o menos bien traídas.

Como no hay discos físicamente hablando, pues no he disñado portadas, contraportadas ni cubiertas como en Escarceos y simulacros.

Como en aquel disco, en algunos temas me acompaña el buen Emilio Lobato con uno de sus saxos (no recuerdo cuál), dándole un toque de calidad a mis humildes guitarrazos.

Se incluyen a modo de bonus tracks dos temas muy distintos. "Son un infierno" es una versión rockerizada que hice para una canción de Rubén Gamito y su gente, alumno que protagonizó años ha La razón de la sinrazón.

También "regalo" una versión que J. M. Ruiz Rico hizo muy artesanalmente de "2000 Light Years From Home" de The Rolling Stones. A pesar de las deficiencias técnicas me pareció que estaba tocada y cantada con mucho arte, salero, tronío y entusiasmo".

Iré colgando los temas quizás semanal y dominicalmente. Hoy toca el primero, "Casablanca".

http://montecoronado.jimdo.com/music/souvenires/

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿le has pedido permiso a JM?
¿ y a Jagger y Richards? Mira que las estrellas tienen unos prontos. Lo digo por el primero.
Ah, y cuelga alguna de Talycual, hombre.

El Comentador de Ocaña